1. Desconfía del mundo, creete a ti mismo. Título es un proceso personal y autocrítico. No necesitas seguirle el amén a algunas personas . Evalúa razonablemente todos sus comentarios, y si no te satisfacen, recházalos. Título no es taller. Es tu proyecto....
2 Evita las decisiones de proyecto. Sustituye las "decisiones de proyecto" por "conclusiones de proyecto". Evita que tus ideas parezcan como opciones personales y enmárcalas dentro de un proceso racional que las justifique con argumentos externos a la arquitectura. El proyecto debe ser la consecuencia lógica y evidente de un razonamiento indiscutible.
3 Avanza rápidamente. No te distraigas y pierdas el tiempo. Reduce el tiempo dedicado a los "antecedentes" al máximo. Prepara un layout lo más rápido posible y resuelve el proyecto. Luego tienes meses para mejorarlo. Si tienes tiempo, podrás volver atrás cuantas veces quieras. Si no lo tienes, con suerte podrás ir hacia delante. El "paso lento, pero seguro" no existe en la arquitectura.
4 Prepara argumentos, no plantas. Nadie quiere saber si puedes resolver una planta. A no ser que cometas un error descomunal, se ‘asumirá’ que está bien. Concéntrate en entender correctamente la lógica del proyecto. Piensa, evalúa y critica a tu proyecto desde todas las aristas posibles. Ten tus ideas claras, firmes y ordenadas.
5 Dios está en los detalles. Hagas lo que hagas, todo el mundo se fijará en los detalles. Aquella cosa ínfima de ninguna importancia se puede convertir en la piedra en el zapato que te haga caer. Dios y el Diablo se esconden en los detalles; tú debes elegir cual se queda.
6 Importa la presentación, no el proyecto. Tu proyecto puede ser un excelente edificio; pero si no lo dices, no sirve de nada. Prepara tu presentación con todo el tiempo del mundo. Redacta, sintetiza y refuerza las ideas que dirás. Ensaya y escúchate. Un buen proyecto con una mala presentación es un mal proyecto.
7 Haz lobby. La arquitectura no se demuestra, se convence. En vez de remitirte sólo a los 40 minutos de tu exposición, empieza desde ya. Habla con los profesores y promueve tu proyecto. Anticipa y evita las sorpresas: si te quieren insultar por un proyecto tan malo, que lo hagan ahora; no el día del examen.
jpg.JPG)
